A bocinazo limpio llegaba la caravana de coches con los trabajadores de Alu Ibérica a Oviedo, a las inmediaciones de la sede de Presidencia del Principado para reclamar soluciones a su situación.
El Presidente del Comité de empresa calificó de éxito la caravana de protesta, en la que evidencia que se sienten estafados y no conocen ningún inversor. Afirma que aún hay tiempo para que se mantenga la producción y se puedan adoptarse soluciones transitorias, como la intervención de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).
Jose Manuel de la Uz dijo que no piden la nacionalización de la planta Avilesina, sino respaldo hasta que pueda llegar un inversor que no sea un carroñero y cuente con los trabajadores. Dijo que la SEPI lo hace con muchas empresas y en este caso tiene carácter estratégico.
Los trabajadores culpan al Gobierno del PSOE de que España deje de producir aluminio primario en España y critican con dureza a los responsables nacional y autonómico. Jose Manuel de la UZ espera que el consejero de Industria sea reprobado el miércoles en el pleno extraordinario de la Junta General.