INDUSTRIA

FADE urge medidas que abaraten el coste energético para la industria electrointensiva

María Calvo advierte de que la competitividad importa tanto como la descarbonización

Europa Press

Oviedo |

María Calvo, nueva presidenta de FADE
María Calvo, nueva presidenta de FADE | CHISCO GARCÍA

La Federación Asturiana de Empresarios, FADE, ha recordado este miércoles que durante un tiempo considerable han expresado su preocupación y alertado tanto en público como directamente al Gobierno acerca de la situación de la industria electrointensiva y aseguran que la razón principal por la que las inversiones no avanzan está clara y no es otra que la falta de garantía de un precio competitivo para la energía.

Señala FADE que este problema no es exclusivo de España, sino que países vecinos, pese a tener en muchos casos precios más altos para el mercado generalista, están implementando soluciones diversas para contener el coste de este input clave para su industria y paliar, así, el impacto en sus economías.

"En España buscamos liderar la descarbonización, pero la sostenibilidad no se limita solo al ámbito medioambiental. Debemos reconocer que la falta de competitividad tendrá consecuencias significativas en la riqueza, el empleo y los servicios públicos.

Financiar la transición es esencial, pero también lo es asegurar la competitividad durante y después de este proceso", indica la patronal asturiana.

Añaden desde FADE que aunque valoran el compromiso de apoyo al proyecto de Arcelor con fondos europeos, es evidente que las empresas ya no basan sus decisiones de inversión únicamente en estos respaldos y por ello asegura la patronal que es fundamental reconocer que las condiciones de competitividad son el factor determinante.

"Las ayudas no serán efectivas si no se garantizan entornos competitivos y estables. Instamos a las administraciones a que prioricen este asunto, porque estamos hablando de empleo y soberanía. Es necesario actuar de manera inmediata para cambiar el

rumbo y asegurar la sostenibilidad en todos los aspectos: medioambiental, económica y social", concluyen los empresarios asturianos.