Viaje para la Historia
Asturias ya está más cerca de buena parte de España gracias a la apertura de la variante de Pajares y sus 50 kilómetros de alta velocidad tras casi 20 años de obras y cerca de 4.000 millones de inversión, el cuádruple de lo previsto en 2003. El viaje inaugural ha sido presidido por el rey Felipe VI acompañado por el presidente del Gobierno Pedro Sánchez y los presidentes de Asturias Adrián Barbón y Castilla y León Alfonso Fernández Mañueco entre otras autoridades. En este vehículo especial iban en total 300 pasajeros de los que 100 eran periodistas, algunos de medios de comunicación extranjeros.
El tren salía de Chamartín con apenas cinco minutos de retraso. Tras dos paradas en Valladolid y León, el viaje entre Madrid y Oviedo ha durado tres horas y diez minutos. La duración de los servicios comerciales dependerá del número de paradas de cada convoy. En el caso del recorrido con León, ya sin paradas, el viaje duró 55 minutos.
El recorrido de los 25 kilómetros en alta velocidad por el túnel duró 7 minutos 33 segundos a una velocidad máxima de 201 kilómetros por hora aunque el tope puede llegar a 275. La velocidad de entrada en la boca sur cercana a La Robla fue de 163 kilómetros por hora.
En Pola de Lena la velocidad de paso por la estación fue de 48 y por Mieres de 85. En el recorrido sin alta velocidad Campomanes-Oviedo, la velocidad máxima superó levente los 100 kilómetros por hora. Ya en Oviedo, acto oficial de inauguración en un gran carpa en cuyo exterior recibían a los invitados una parte de la Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo. Un poco más lejos, había una protesta relativa a Pedro Sánchez y la amnistía.
Un país orgulloso de su diversidad, afirma Pedro Sánchez.
Ante el rey Felipe VI fueron pasando los principales dirigentes políticos. Cerró el acto el presidente del Gobierno Pedro Sánchez quien aludió a la “excelencia” de las empresas españolas que han permitido situar a nuestro país como el primer país en líneas de alta velocidad de Europa y el segundo del mundo tras China después de invertir 65.000 millones para alcanzar ya 30 provincias con 4.000 kilómetros de red. Se prevén 9.000 millones más para avanzar en la misma.
Respecto a Asturias, Pedro Sánchez aludió a la necesidad de una transición justa y una reindustrialización basada en el hidrógeno verde, los microchips y las energías renovables. Sánchez señaló que la variante abre “nuevas oportunidades y es una mano tendida para unir un país orgullos de su diversidad”. El jefe del ejecutivo central terminó su discurso aludiendo al espíritu de avance del gijonés Gaspar Melchor de Jovellanos, siempre proclive a la mejora de las comunicaciones hace ya 200 años.
El ministro de Transportes y Movilidad Óscar Puente aludió a la “imagen excelente de España” gracias a obras como la variante. No es sólo ingeniería, advirtió, también supone equilibrio territorial. “El precio es alto pero el valor es incalculable por lo que supone de igualdad”. Puente señala que descarbonizar genera empleo. Indica que Renfe ha vendido ya 70.000 billetes con la promoción de la variante y augura un 1.250.000 pasajeros en 2024. “No es un punto final sino el inicio de una nueva era”. En ese aspecto, el ministro aludió a la duplicación de la vía entre León y Valladolid así como 100 millones de euros para modernizar Lena-Oviedo. También anunció que “pronto” habrá actuaciones en Cercanías.
El presidente del Principado Adrián Barbón aludió al sentimiento de aislamiento sufrido históricamente por Asturias que este nuevo trazado ferroviario debe ayudar a solventar. Prefirió dejar discursos escritos por intervención sin papeles para hablar, dijo, “como un asturiano”. “Es un día de nuestra historia y una obra de titanes”, señaló el jefe del ejecutivo asturiano reconociendo el trabajo de muchos ministros y del equipo técnico que ha estado durante tantos años en la obra. En cuanto asuntos pendientes, Barbón apeló al ministro Puente para citarle el Corredor Atlántico, las Cercanías, el vial de Jove, la autovía del Suroccidente, el soterramiento de Langreo e incluso, como representante general del Gobierno del España, la recuperación de la fábrica de armas de La Vega en Oviedo cuyo alcalde, Alfredo Canteli, estaba presente.
El presidente de Castilla y León Alfonso Fernández Mañueco aludió al trabajo de los diversos gobiernos teniendo en cuanta que fue una obra impulsada por el ejecutivo de José María Aznar dado que la licitación tuvo lugar en 2003. El presidente popular de la comunidad vecina señaló como objetivo el Corredor Atlántico. Pidió trabajar en la preservación de los acuíferos y la rampa de Pajares para que tenga uso. En ese sentido, apeló a su homólogo asturiano para “revindicar la voz que nos une”.
