El entorno de los ayuntamientos de Nava e Infiesto fueron los lugares elegidos para que un nutrido grupo de voluntarias tejiese este domingo con el objetivo de elaborar los denominados manguitos sensoriales, para los afectados por Alzheimer.
Se teje una prenda con un objetivo terapéutico, mantener ocupadas las manos inquietas. Se persigue que se convierta en una herramienta cotidiana para mejorar el bienestar de personas con algún tipo de demencia, como es el Alzheimer.
Para elaborar estos manguitos se trabaja un rectángulo de 30 x 60 cm, utilizando al menos 3 tipos distintos de lana (de distinto grosor) y distintas técnicas (punto o ganchillo). El lado más largo (60 cm) se dobla a la mitad, para conseguir una textura más gruesa, se obtiene así un cuadro de 30 x 30 cm, que vuelve a doblarse cosiendo dos extremos y convirtiéndose en un cilindro. Ya tenemos nuestro manguito sensorial.
Es aconsejable realizar una primera valoración por parte de psicólogo, fisioterapeuta y/o terapeuta ocupacional para casos de alto deterioro. Evitar en caso de conductas disruptivas o de exploración bucal.
