Primeros compases de los encuentros convocados por el presidente del Principado con la mayoría de los grupos parlamentarios sobre la reforma del Estatuto de Autonomía. Comienza con un refuerzo de las posiciones de inicio y la una propuesta del PP para negociar condicionada a retirar la oficialidad.
El Gobierno ha expuesto 11 puntos que incluyen el reconocimiento de la capitalidad de Oviedo, los decretos-ley, declaración de objetivos de políticas públicas, flexibilizar la convocatoria adelantada de elecciones autonómicas, la redacción de un preámbulo, regulación diferenciada de las mociones de censura y confianza, referencia a la administración local y la oficialidad del asturiano y el eo-naviego. Esta es la clave.
El PP acudió a la reunión con una pregunta: si los 11 puntos que propone Barbón son negociables. Se les respondió que sí. Por eso la presidenta popular Teresa Mallada plantea a Barbón un acuerdo rápido de reforma estatutaria sobre casi todos los puntos pero dejando fuera la oficialidad. Este planteamiento no le consta como tal a la portavoz socialista Dolores Carcedo. Lo que sí tiene claro es que los socialistas asturianos tienen un compromiso programático y electoral con la oficialidad.
Daniel Ripa, de Podemos, cree que es un día histórico que debe terminar con un nuevo estatuto con participación ciudadana. Pide celeridad. Izquierda Unida no quiere que el resto de grupos enreden, dice el coordinador Ovidio Zapico, para así tener concluido el proceso antes del 30 de Junio. El modelo de oficialidad es el de Galicia.
Zapico cree que es pronto para precisar qué significaría esa oficialidad. Como ejemplo, les contamos que en la enseñanza de la comunidad vecina se dan asignaturas en español y gallego. En esta lengua se dan materias como Geografía e Historia y Biología y Geología. Cada centro en Galicia decida qué materias se ofrece en cada lengua y debe hacer el mismo porcentaje semanal en ambas lenguas.
