Homenaje con emoción a los 190 asturianos deportados en campos de concentración nazis. La mayoría son republicanos huidos a Francia tras la Guerra Civil y que lucharon contra los ocupantes del país galo.
En una abarrotado Antiguo Hemiciclo de la Junta General del Principado, se han leído los nombres de los recluidos, la mayoría asesinados, otros liberados por las tropas aliadas.
José Manuel López Alonso, en nombre de las familias, señaló la importancia del significado que este acto hubiese significado “para los que sobrevivieron y llegaron a conocer la democracia en España tras el horror sufrido”. López Alonso leyó una carta de Benjamín Alonso, asturiano liberado, dirigida a Rafael Fernández para solicitar ayuda a los asturianos emigrados a México y para pedir que fuesen enterrados en España. El portavoz de los familiares solicitó la ayuda de los Ayuntamientos para colocar 41 de las llamadas “stolpersteine”, piedras de tropiezo en alemán, con el no nombre de cada deportado ante su casa o lugar de trabajo. También solicitó la colocación de una placa con los nombres de todos los identificados.
En este sentido, el presidente del Principado propuso, si hay acuerdo con el Ayuntamiento de Oviedo, colocar ese recuerdo en el Campo de San Francisco donde, recordamos, ya hay un monolito en memoria del Holocausto judío. Adrián Barbón encuadró este homenaje a los deportados en campos nazis en el contexto de la memoria democrática y por tanto con los crímenes del franquismo y el parque ovetense podría ser un “emplazamiento de recuerdo colectivo”. El jefe del ejecutivo regional afirmó que “solo plantando cara y sin velos en el espejo vamos a superar los miedos del pasado con un relato colectivo propio de la madurez democrática”. En ese sentido, Barbón pidió “perdón por el olvido de los sucesivos gobiernos socialistas”.
El presidente de la Junta General Marcelino Marcos recuerda que el desenlace de la Guerra Civil española cambió la vida de muchos asturianos y españoles al llevarles a escapar de los combates o la represión franquista. Personas que luego combatieron contra el totalitarismo nazi en la Segunda Guerra Mundial. El drama de la deportación de los republicanos asturianos y españoles sigue siendo un tema “desconocido”. Ni la memoria del Holocausto ayuda a recordarles y genera “todavía sorpresa que en aquellos recintos había personas que hablaban asturiano”.
