En su denuncia falsa aseguró que le habían robado la cartera y el teléfono móvil. Los agentes vieron varias contradicciones e inexactitudes en su relato y lograron determinar que tal robo no se había producido.
El joven sierense acabó admitiendo haber falseado lo sucedido "por temor a que se enterase su familia de sus puestas en Internet en las que había gastado todos sus ahorros".