La Consejería de Industria, los sindicatos UGT y CCOO, las empresas auxiliares y ArcelorMittal han firmado este viernes dentro de la reunión de seguimiento de los 'Acuerdos de Oviedo' una prórroga de los mismos para garantizar la estabilidad de los trabajadores hasta 2027. Los acuerdos también implican la elaboración de un plan de formación o dar prioridad a los eventuales en la contratación, además de la subrogación de los trabajadores o la garantía de recolocación de los posibles excedentes. Los acuerdos afectan a unos 1.000 trabajadores directos y a una plantilla auxiliar de 3.000 empleados.
El acto lo ha presidido el consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica, Enrique Fernández, que ha puesto en valor la renovación de unos acuerdos que desde hace 29 años "han consolidado un marco de normalidad y estabilidad en las relaciones laborales de las empresas auxiliares que, al margen de las discrepancias puntuales, han garantizado la estabilidad productiva en la primera empresa industrial de Asturias y considerables ventajas para las plantillas". El nuevo documento marco, con cinco años de vigencia, actualiza y adapta los compromisos a la nueva realidad del sector industrial, en particular a los retos derivados de la transformación tecnológica, al proceso de descarbonización por el que ha apostado ArcelorMittal en Asturias y a la necesaria mejora de la competitividad de la siderurgia para garantizar sus posiciones de liderazgo en los mercados globales.
El secretario general de CCOO de Industria, Damián Manzano, ha indicado que los acuerdos "son muy importantes" al suponer una serie de cambios en la siderurgia asturiana y dar a los trabajadores una garantia de empleo y de derechos. "Da estabilidad a la siderurgia asturiana", ha sentenciado. Por su parte, desde UGT han indicado a través de nota de prensa que el objetivo de los acuerdos es abogar un modelo que reforzará la paz social en el conjunto de las instalaciones fabriles de la multinacional en Asturias.
El consejero de Industria Enrique Fernández resalta la renovación de unos acuerdos que ofrecen "un marco de normalidad y estabilidad en las relaciones laborales de las empresas auxiliares" desde hace tres décadas. Hay compromisos sobre formación según las necesidades de Arcelor, recolocaciones antes posibles excedentes y compromiso de subrogaciones. El acuerdo tiene una vigencia de cinco años y, según el Principado, se adapta a la transformación tecnológica, la descarbonización y la competitividad.
