Vacunación infantil
Los niños de 5 a 11 años en Asturias serán vacunados contra la covid en los puntos habituales y centros de salud. El Servicio de Salud del Principado había barajado la posibilidad de que la administración de la vacuna fuese en los centros escolares pero, tras aprobarse que la inoculación en España empezará el 15 de diciembre con 8 días lectivos por delante, se ha decidido que la vacunación sea en entornos puramente sanitarios, explica la gerente del Sespa. Concepción Saavedra cree que la vacunación de estos niños de 5 a 11 años se puede hacer en una semana. Son 47.000 menores y la capacidad del sistema permitiría vacunar a 90.000 en 7 días. Sobre la incidencia de la covid entre los más jóvenes, acabamos de conocer los datos de incidencia en centros escolares, desde escuelas infantiles hasta Bachillerato. Y no son nada buenos: en una semana se duplican los positivos tras detectarse 416 positivos entre estudiantes, la mayoría, y profesionales. Esto supone más que duplicar también las aulas confinadas, 161, y dejar en casi 2.300 los alumnos aislados.
Sobre el ritmo general de vacunación, Saavedra confía en que los mayores de 60 que lo quieran, podrán estar vacunados antes del 19 de diciembre. El sistema de citación ha cambiado hace dos días. Se realiza una llamada a móvil o fijo para ofrecer lugar, fecha y hora y la opción de vacunarse o no. Si no contestan, se volverá a llamar con 35 contratados en el 'call center'. Por otro lado, se va a licitar un sistema de llamada automática mediante un contrato de más duración de forma que sirva para cribados o para otras campañas de vacunación, como la de la gripe.
Gestión de la pandemia
Son comentarios y datos ofrecidos por las autoridades sanitarias en la comisión parlamentaria de salud de esta mañana. Suben la incidencia y los ingresos hospitalarios, parámetro éste último que guía buena parte de las decisiones de control de la pandemia. Ante el aumento de relaciones sociales vinculadas a las celebraciones navideñas, el consejero de Salud Pablo Fernández alega que técnicamente no hace falta establecer limitaciones a la actividad ordinaria. La única novedad, que el consejero confirma, es que hostelería y gimnasios deben tener medidores de CO2 para controlar el nivel de ventilación en lugares cerrados. 800 de concentración de CO2 es el nivel máximo. Las inspecciones han comenzado. Sin descartar posibles sanciones, ahora se centran en informar. Fernández afirma que el trabajo de los rastreadores a la hora de encontrar contactos estrechos es mejor que la media nacional.
