Ningún equipo tiene mejor medicina para sus males que las victorias y el Real Oviedo ha encontrado su refugio perfecto en el Carlos Tartiere. Las cuatro últimas victorias consecutivas así lo confirman y las sensaciones que desprenden los pupilos de Javi Calleja han conseguido despejar todas las dudas que había a su alrededor hace apenas dos meses.
El 4-1 endosado al Mirandés es un golpe encima de la mesa y la confirmación de varios jugadores. Alemao ya es uno de los mejores arietes de la categoría y además de sus cuatro goles está demostrando que la campaña de adaptación del curso pasado ha destapado a un delantero llamado a grandes logros vestido de azul.
Hassan estaba siendo uno de los jugadores más señalados en el arranque liguero, pero su partido ante el Mirandés empieza a dar la razón a los que apostaron tan fuerte por su fichaje y se le ve un margen de mejora que debe aumentar su participación en el equipo.
Santi Cazorla sigue siendo el gran líder del juego y Chaira mantiene su nivel, lo mismo que Colombatto. En la línea defensiva tanto Lemos, como Rahim dieron un paso al frente y los que salen desde el banquillo también aportan como demostraron Del Moral, Álex Cardero, Sebas Moyano o Paraschiv. Además, la defensa suma un efectivo más porque Jaime Vázquez volvió a demostrar que se puede confiar en él cuando sea necesario.
La única pena de lo vivido ayer fueron las lesiones de David Costas y Jaime Seoane, que a falta de confirmación definitiva parece que dejarán a ambos jugadores fuera del equipo durante varias semanas.
Javi Calleja cubrió de elogios a los suyos al final del encuentro y en el enlace de esta noticia puedes escuchar su rueda de prensa íntegra.