Santi Cazorla, actual jugador del Real Oviedo, y Lucas Pérez, figura del Deportivo de La Coruña, compartieron momentos inolvidables en el Arsenal bajo la dirección de Arsène Wenger, en la campaña 2016-17. Durante su estancia en el club londinense, ambos jugadores forjaron una buena relación y en los últimos tiempos ambos demostraron el amor que sienten por sus equipos de toda la vida regresando a ellos en categorías impropias de su calidad.
Ahora, varios años después de aquella etapa, los destinos de ambos futbolistas se cruzaron nuevamente en el partido entre Deportivo y Real Oviedo, disputado en Riazor. El encuentro no sólo significó tres puntos en juego, sino también un emotivo reencuentro entre dos amigos que compartieron éxitos y desafíos en la élite del fútbol mundial.
Durante el partido, ambos jugadores dejaron de lado la nostalgia y mostraron su profesionalismo. Cazorla, con su visión y control del juego, intentó dirigir los ataques del Real Oviedo, mientras que Lucas Pérez, con su olfato goleador, se convirtió en una constante amenaza para la defensa asturiana. Aunque el duelo terminó siendo disputado, ambos jugadores mantuvieron una actitud respetuosa y competitiva, conscientes de la importancia de sumar puntos para sus respectivos equipos.
Al final del encuentro, más allá del resultado, quedó claro que la verdadera victoria fue el reencuentro de dos jugadores que, a pesar de haber seguido caminos distintos tras su etapa en el Arsenal, siguen compartiendo una profunda admiración mutua y una conexión que trasciende el fútbol. Ambos dejaron una imagen y una charla icónica
Para los hinchas del Deportivo y del Real Oviedo, así como para los seguidores del Arsenal que siguen las trayectorias de estos jugadores, el reencuentro entre Santi Cazorla y Lucas Pérez en Riazor fue un momento especial que recordó los días de gloria que ambos vivieron en la Premier League. Además, fue una oportunidad para ver de cerca a dos futbolistas que, a pesar del paso de los años, siguen demostrando su calidad en el terreno de juego.
Sin duda, este tipo de reencuentros demuestran que el fútbol es mucho más que solo resultados y puntos. Es un deporte que une, genera lazos y crea recuerdos imborrables tanto para los jugadores como para los aficionados.