Parecía una empresa muy complicada plantar cara a un rival de la LEB Oro en las condiciones que llegaba el Unicaja Banco Oviedo y los peores pronósticos se cumplieron en Pumarín. El Girona aplastó a los locales para llevarse un triunfo por 46-80 y golpeó la debilidad de plantilla con la que los carbayones afrontaron el encuentro.
No hizo falta el concurso de Marc Gasol para que el Girona demostrase desde el inicio. El dominio de los catalanes fue absoluto en los 40 minutos de partido.
En descarga de los de Natxo Lezkano hay que recordar que este partido, aplazado en su día por el covid, llegaba marcado por las bajas en los ovetenses. Los últimos fichajes, Jorgensen y Atencia, no podían participar al no estar inscritos en la fecha prevista y además Xavier fue baja, lo que dejó a Alonso Meana como único jugador específico para organizar el juego, con el apoyo del canterano Fernando Suárez que se estrenó en LEB Oro.
El equipo encajó su cuarta derrota consecutiva y el panorama no mejora con vistas al próximo domingo cuando visitarán Lleida para recuperar el segundo encuentro aplazado y en el que volverán a contar con los mismos efectivos lo que reduce el margen de maniobra al técnico de los ovetenses.
En el enlace de esta noticia puedes escuchar las valoraciones de Lezkano al término del encuentro.