“En nombre de la plantilla hay que pedir disculpas a nuestra gente”. La reflexión de Santi Cazorla al término del encuentro en el Martínez Valero son el mejor resumen de un partido en el que el Real Oviedo directamente no compareció y dejó una sensación de impotencia total ante un Elche muy superior que le hizo cuatro goles, pero que pudieron ser bastantes más.
Todo se torció muy pronto, con un penalti cometido por Jaime Vázquez, que ayer tuvo una mala tarde pero que convendría entender dentro de su proceso de crecimiento y no cargar las tintas sobre un central juvenil que está cumpliendo con creces en la mayoría de sus actuaciones. Un error colectivo en defensa provocó el 2-0 en la última acción de la primera mitad y ya ponía las cosas muy de cara para los de Eder Sarabia.
La segunda mitad no trajo ninguna mejoría carbayona y el Elche siguió castigando a los de Javi Calleja que nunca transmitieron la sensación de poder pelear el encuentro. Siguieron llegando los goles e incluso los franjiverdes desperdiciaron una pena máxima que pudo haber hecho más sonrojante el resultado final. El debut de Portillo con la elástica azul se quedó en una anécdota.
El equipo tendrá la ocasión de resarcirse el próximo viernes jugando en el Carlos Tartiere ante el Huesca, en un encuentro en el que volverá al equipo Dani Calvo, tras cumplir su sanción en Elche y se espera también por Carlos Pomares y Fede Viñas.
En el enlace de esta noticia puedes escuchar la rueda de prensa íntegra de Javi Calleja.