Con la ilusión reflejada en el rostro, Rubén Reyes y Antonio Rivas comparecieron en la sala de prensa del Carlos Tartiere. Acompañados por el vicepresidente de la entidad, Manuel Paredes, los nuevos encargados de la parcela deportiva azul mostraron las que pueden ser sus líneas maestras de trabajo en el Real Oviedo.
Reyes dejó claro que llega con el objetivo de reforzar el área deportiva del club, sin grandes marcas deportivas y con la necesidad de realizar 11 fichajes, pero que los afrontará sin urgencias y sin verse afectado por las prisas que pueda haber en el entorno por ver las caras nuevas. No descarta utilizar las cesiones para reforzar el equipo, ni acudir al mercado extranjero para encontrar los jugadores necesarios.
Confirmó que Roberto Suárez, Mario Prieto y Álex Díaz trabajarán con él en la secretaría técnica y que ya hay una buena base de jugadores con contrato sobre la que trabajar.
La continuidad de José Ángel Ziganda fue una decisión consensuada con él y aseguró que: "Tenemos el mejor entrenador que podríamos tener porque es valiente con la gente joven".
Antonio Rivas afronta su tercera etapa en la entidad y reconoció que se encontró el Real Oviedo: "cambiado, ahora hay mucha más gente y se quiere armara una estructura profesional y organizar un proyecto ambicioso. Hay ganas de crecer y que el club no se estanque".
Pidió un poco de tiempo para tomar tierra y analizar todo el trabajo que ya hay hecho en el club y se propone mejorar aquellas parcelas que entienda que son posibles, siempre con el objetivo de que lleguen jugadores formados en la base al primer equipo, que el fin último del trabajo de formación, por encima de la consecución de logros deportivos de los equipos inferiores.