Siguen cayendo las hojas del calendario y nadie quiere ceder en la lucha por estar en el playoff. El Real Oviedo, a falta de tres jornadas para el final, sigue ocupando la sexta plaza pero la amenaza de Ponferradina y Girona sigue ahí. Los próximos nueve puntos dictarán sentencia y los azules sueñan con estrenarse en la lucha por el ascenso a Primera desde el regreso a la categoría de plata.
Lo complicado de la categoría queda claro cuando un equipo que suma nueve jornadas sin perder, con siete victorias y dos empates, no ha sido capaz de distanciar a los perseguidores, ni dar caza a los que le preceden.
EL último punto en Málaga puede valer su peso en oro, pero para ello el Oviedo tendrá que solventar la visita del Zaragoza al Carlos Tartiere con una victoria. Para cuando se dispute el partido, los azules sabrán lo que han hecho sus rivales directos. La Ponferradina visitará el José Zorrilla para medirse a un renacido Valladolid; mientras que las Palmas tiene una salida más que asequible visitando al descendido Alcorcón.
En la siguiente jornada, habrá duelo directo entre canarios y ovetenses y los bercianos recibirán al Leganés. El cierre del curso tendrá al Oviedo como local frente al Ibiza, Las Palmas visitará El Molinón y la Ponfe jugará en Lezama frente al Amorebieta.
Todos tendrán un ojo puesto en el partido que hoy disputan Girona y Tenerife. La pelea por acabar entre los seis primeros puede estar incluso más abierta. Los canarios deberán jugar contra Málaga, Eibar y Cartagena; mientras que los catalanes se verán las caras con Sporting, Mirandés y Burgos.
Todo está por decidir y en tres semanas se sabrá que equipos pelearán por estar la próxima temporada en la máxima categoría. José Ángel Ziganda tiene a su favor el buen estado de forma de muchos de sus jugadores y que sólo Lucas está fuera de combate por culpa de una inoportuna lesión muscular. Esta semana será larga para los carbayones que no jugarán hasta el lunes a las 21.00 horas.
