Nacho Vidal, que revisó el partido detenidamente, consideró que el equipo realizó un buen encuentro, aunque destacó aspectos a mejorar. "Vi el primer tiempo ayer y hoy veré la segunda. No hicimos mal partido, ni mucho menos. Tenía esa sensación jugando y he vuelto a sentir lo mismo al verlo. En el primer tiempo te generan dos ocasiones, una a balón parado y otra en una pérdida. Si algo tengo que decir del partido es que tenemos que ser más exigentes en los pequeños detalles, por ejemplo, en los saques de banda", apuntó.
El lateral derecho insistió en la relevancia de mejorar en esas jugadas de estrategia. "Igual le quitamos importancia porque se dan mucho en los partidos, pero ya en el descanso le dije a Luismi (Loro, segundo entrenador) que nos estaban haciendo daño ahí, sacándonos de zona fácil y así llegó el gol con el que perdimos. Hay que dar más valor a eso, pero a partir de ahí, seguir haciendo lo que estamos haciendo. Volví a ver un equipo sólido y maduro, la línea a seguir es esta", añadió.
Preguntado sobre si el Oviedo es un equipo "chupón", el defensor lo negó rotundamente. "Somos un equipo muy maduro, capaz de afrontar los partidos y que nos movemos bien en diferentes facetas del juego. Contra el Deportivo, tras recuperar el balón estuvimos algo precipitados y eso significa no atacar con claridad. Habrá momentos contra estos equipos fuertes en los que tocará defender y hay que ser capaces de mantener la calma, encadenar un pase de seguridad y ser mejores tras robo".
En cuanto al siguiente compromiso liguero, el defensa del Real Oviedo se mostró cauto ante el Mirandés. "Será un partido en el que por momentos nos toque sufrir y aguantar arreones. Son un equipo muy dinámico, con muchas armas ofensivas. No nos tenemos que poner nerviosos. Cuando te ves arriba parece que hay que dominar siempre y tener el 70% de la posesión y no es así. Muchas veces los goles vienen en los detalles, ya se vio ante el Dépor. Hay que estar concentrado".
En el enlace de esta noticia puedes escuchar la rueda de prensa íntegra de Nacho Vidal.