La Consejería de Derechos Sociales y Bienestar iniciará la próxima semana el proceso de reparto de las tarjetas monedero a familias con hijos o hijas menores y en situación de extrema necesidad, tras aprobar este viernes la resolución correspondiente. Las personas beneficiarias podrán canjear directamente esos fondos en los supermercados por productos básicos.
En una primera fase, la tarjeta se asignará a 556 hogares que cumplen los requisitos y, en total, los bonos llegarán a cerca de 2.000 familias que perciben el salario básico y cuyos ingresos se sitúan por debajo del 40% de la media nacional. Las personas beneficiarias no tendrán que solicitar la tarjeta, ya que serán los propios servicios municipales o autonómicos los que se dirigirán a ellas, para evitar cargas burocráticas, según indican desde el Ejecutivo autonómico.
La resolución se ha presentado en la reunión del Consejo Asesor de Bienestar Social, presidida por la consejera Marta del Arco, y persigue establecer un sistema equitativo, ágil, eficaz y eficiente, así como garantizar la convivencia de todas las fórmulas que existen hasta ahora para paliar las situaciones de mayor vulnerabilidad.
Esta iniciativa, que responde al objetivo de reducir la pobreza infantil, supone un cambio de filosofía en el programa de asistencia a personas en situación de extrema vulnerabilidad financiado por el Fondo Social Europeo Plus (FSE+), ya que sustituye a la tradicional entrega directa. Con la tarjeta monedero, las familias podrán acceder directamente a alimentos frescos y alimentación infantil, así como a productos básicos de higiene, incluidos los de higiene femenina. El nuevo sistema supone una notable mejora respecto al reparto de alimentos.
La puesta en marcha del nuevo programa, que este año movilizará en Asturias 1,5 millones, se lleva a cabo a través de Cruz Roja, entidad que se encargará de la distribución, control y seguimiento. A partir de enero de 2025, las autonomías asumirán por completo la gestión de las tarjetas y el Principado contará con una cuantía estimada de 8,7 millones hasta 2027.
El importe mensual que percibirán las familias en sus tarjetas dependerá del número de miembros que las integren. Así, un adulto y un menor recibirán 130 euros, 160 una familia de tres miembros, 190 una de cuatro y 220 si son cinco o más.
Las tarjetas tendrán una carga inicial por el importe equivalente a cinco meses y podrán utilizarse en cualquiera de las cuatro cadenas de supermercados adjudicatarias del servicio licitado por Cruz Roja a nivel nacional y con implantación en Asturias: Carrefur, Eroski, Alimerka y Alcampo.
Derechos Sociales se ha comprometido, asimismo, a colaborar con el Banco de Alimentos y con las fórmulas de reparto de productos que venían financiándose con cargo al anterior Fondo de Ayuda Europea para los Más Necesitados (FEAD). Para ello, destinará 1,5 millones en la próxima convocatoria de subvenciones a entidades sin ánimo de lucro, que se abrirá en las próximas semanas, un millón más que en el ejercicio anterior. La finalidad es contar con la misma cobertura que hasta ahora, bajo la premisa de que ninguna situación de extrema necesidad quede sin atender.
La Consejería movilizará este año 69,3 millones para luchar contra la pobreza material severa. De este presupuesto global, 52,5 millones permitirán sufragar el salario social básico que reciben más de 10.000 familias, mientras que otros 16,8 se dedicarán a financiar las ayudas de emergencia.
