Entonces la colaboración del Consell Insular d’Eivissa, a través del Departamento de medio Rural y Marino, la Asociación de Panaderos y Pasteleros de la PIMEEF y la Cooperativa de Santa Eulària, permitió la comercialización de pan elaborado con este trigo a través de siete hornos de la isla. Si hasta entonces la superficie cultivada se había estabilizado alrededor de 20 ha, en el año 2019 ya se superaron las 35 ha.
Y en la campaña 2020-2021 que actualmente se está cosechando, ya se han alcanzado las 48 ha, lo cual supone un incremento del 140%. Hay que destacar en este aumento la iniciativa de varios hornos que, para asegurarse el suministro, han puesto en cultivo nuevas parcelas. Can Blai fue el pionero, al cual le siguieron Can Coves y Can Bufí, los cuales en conjunto cultivan cerca de 15 ha. Que se suman a las 12 ha que cultiva Xico Bufí para la Cooperativa de Santa Eulària. Hay que añadir otros pequeños agricultores que venden su excedente a la Cooperativa de la villa del Rio.
Desde su lanzamiento, el pan Xeixa ha tenido muy buena acogida, especialmente entre la población mayor de origen ibicenco, quienes han recuperado un sabor que se había conservado en la memoria y así lo han transmitido a las nuevas generaciones. En poco tiempo se ha convertido en un pan para los momentos especiales.
La comercialización de pan Xeixa es un ejemplo de cómo los hábitos de consumo pueden incidir en la sostenibilidad del sistema alimentario. El beneficio no se limita a los hornos tradicionales, los cuales comercializan un producto único y diferenciado, sino que son más amplios ya que se conserva una variedad tradicional más adaptada a las condiciones climáticas de nuestra isla y con ello se fomenta la biodiversidad, el agricultor consigue un precio justo al ser compensado con un precio superior, el consumidor obtiene un pan integral de sabor intenso y muy saludable y el cultivo de trigo en las zonas de secano permite luchar contra el abandono que experimenta el campo en Eivissa y reduce el riesgo de incendios.
El crecimiento no sólo se está experimentando en consumo y superficie de cultivo sino también en nuevos hornos que se añaden al proyecto. A finales del año 2020 fue el turno de Es Brot, un pequeño horno de Sant Antonio, y en primavera empezó Es Raconet, un horno en Sant Miquel que hornea pan Xeixa todos los domingos además de elaborar a diario cocas y pizzas a base de harina integral de Xeixa.