De este modo, el número total se eleva a 176,88 cajas en cada isla, según ha informado la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio.
El murciélago es una especie insectívora y es un elemento clave para garantizar el control natural de plagas forestales como la procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa). Además, es un depredador natural de otros insectos voladores como los mosquitos. La instalación de cajas nido permite el aumento y estabilización de la población de quirópteros que actúan como control natural de las plagas forestales.
Según ha recordado la Conselleria, la procesionaria del pino fue declarada plaga forestal en 2016 en Formentera, mientras que en Ibiza todavía no ha sido calificada como tal a pesar de detectarse en los años 70.
Las actuaciones que se han llevado a cabo durante los últimos años para controlar este insecto defoliador consisten en la eliminación de las bolsas que las orugas tejen en invierno; la captura de mariposas con las trampas; la instalación de cajas refugio que favorezcan la presencia de quirópteros; el tratamiento aéreo y tratamiento terrestre puntual.
Sanidad forestal tiene previsto intensificar el año que viene en Mallorca y Menorca la instalación de más cajas refugio para quirópteros, principalmente en las fincas públicas que gestiona el Ibanat.