Medioambiente

Los trabajadores de limpieza de Ibiza finalmente van a la huelga tras discrepancias de última hora

Cuando todo parecía que se iba a solucionar diferencias entre las empresas y los trabajadores en el TAMIB hicieron que saltaran por los aires cualquier tipo de acuerdo

Redacción

Illes Baleares |

Los trabajadores de limpieza de Ibiza aplazan la huelga tras conseguir un acuerdo a última hora
Los trabajadores de limpieza de Ibiza aplazan la huelga tras conseguir un acuerdo a última hora | Redacción

Los trabajadores de limpieza de las empresas Herbusa y UTE Es Vedrà en Sant Joan de Labritja, Sant Josep de sa Talaia y Santa Eulària des Riu finalmente han decidido ir a la huelga indefinida tras intensas horas de negociaciones que terminaron con desacuerdo entre las partes implicadas.

Y eso que a primera hora del viernes todo parecía indicar que se iba al menos a aplazar que no suspender indefinidamente después de que se llegarán a acuerdos en materia salarial y de conciliación laboral. En este sentido, según confirmaron a Onda Cero desde Comisiones Obreras los trabajadores habrían conseguido que las dos empresas se comprometan a un incremento de un 8,5 % en 2024, un 4,5 % para 2025, un 4 % para 2026 y un 4 % para 2027, lo que supone un aumento global en este período de un 21%.

Una subida muy importante ya que según el convenio colectivo vigente en 2023, los peones de limpieza del servicio de recogida de residuos de los municipios afectados por la convocatoria de huelga perciben en torno a 28.300 euros al año, los especialistas de recogida 33.000 euros anuales y los conductores más de 40.000 euros anuales.

Por su parte, en el tema de las mejores condiciones de trabajo para intentar conciliar su trabajo con su vida personal "la empresa también se ha comprometido a una flexibilidad de 15 minutos y otras mejoras laborales" en unas jornadas anuales de 1.768 horas.

Sin embargo, todo estaba pendiente de ser ratificado durante la mañana de este viernes 28 de junio en el Tribunal de arbitraje y medicación de las Islas Baleares, y finalmente no pudo ser posible debido, según fuentes sindicales, a "unas nuevas condiciones laborales que por sorpresa plantearon los representantes de las concesionarias Herbusa y UTE Es Vedrà".