Los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Baleares también han detectado que los precios de la vivienda se mantienen disparados en las islas, aunque con diferencias en ambos segmentos. De esta forma, la venta se estabilizó en 2023, con una subida de entre el 4 y el 7%, mientras el alquiler no ha dejado de crecer y parece que no tiene límites.
En declaraciones a Onda Cero, el presidente del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Baleares, José Miguel Artieda, ha señalado algunos de los problemas que mantiene el mercado de la compraventa de viviendas en el archipiélago: hay poco producto, el producto es caro, faltan solares y el coste de la construcción se ha disparado.
Con respecto a la diferencia entre la demanda del mercado internacional y los intereses de los propios residentes, Artieda asegura que la venta a extranjeros se ha extendido a todas las islas y a las zonas más alejadas de la costa, lo que ha hecho que la vivienda no deje de aumentar, por lo que hoy en día resulta muy difícil encontrar pisos y casas a un precio inferior a los 300.000 o 350.000 euros.