Guillem Servera falleció ayer a la edad de 74 años. El mallorquinismo pierde a una de las personas más relevantes en la historia del club por su gran labor en el fútbol base. Antes de llegar al Mallorca llevó al Cide a lo más alto con jugadores que llegaron a primera división. Toni Prats y Toni Cazorla fueron dos de sus mejores amigos hasta el último momento de su vida. El funeral tendrá lugar el jueves en la iglesia de la Asunción.