221 caballitos de mar se han liberado al mar en Pollença gracias al proyecto de conservación 'Cavallets de mar balears'. Se trata de una iniciativa de la Fundación Palma Aquarium y Banca March que tiene como objetivo facilitar la reproducción de los caballitos de mar mediterráneos. Así lo ha trasladado durante una rueda de prensa celebrada este jueves la directora de la Fundación Palma Aquarium, Débora Morrison: "Queríamos analizar las distintas fases de la liberación". Además, ha añadido que los caballitos "vuelven a su casa en una zona que está muy bien porque es agua somera con poca profundidad y hay mucha vegetación".
Los caballitos de mar son auténticos indicadores de la salud de los ecosistemas marinos. Sin embargo, su población salvaje está actualmente amenazada y en los últimos años se ha visto reducida entre un 25 y un 30 por ciento. Estas criaturas, debido a su fragilidad y vulnerabilidad, enfrentan diversas amenazas de origen humano, como la pérdida y degradación de hábitat, la pesca de arrastre, la contaminación y la alteración de los fondos marinos.
El proyecto, que lleva dos años en marcha, está financiado por un fondo sostenible y solidario de Banca March con el fin de colaborar en la preservación de la biodiversidad del Mediterráneo. Por su parte, Sonia Colino, directora de Unidad de Personas, Marca y Sostenibilidad en Banca March, ha mostrado su orgullo por ser un proyecto que se está desarrollando en las islas: "El componente solidario de Mediterranean Fund, donando un 10% de su comisión de gestión a proyectos nos permite desarrollar iniciativas de recuperación de la fauna del Mediterráneo y es un perfecto ejemplo del espíritu que inspira nuestro compromiso con una gestión que contribuya a un modelo económico integrador y sostenible y que, al mismo tiempo, sea rentable".
El principal objetivo del proyecto es criar una nueva generación de caballitos de mar en edad reproductora para reforzar las poblaciones existentes y permitir un aumento en sus números de manera natural. El director de Palma Aquarium, Joan Rams, ha insistido en que “este esfuerzo conjunto permitirá no solo la recuperación del caballito de mar en el Mediterráneo, sino que sentará las bases para futuras iniciativas que puedan replicarse en la conservación de otras especies amenazadas”.