La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, ha considerado este miércoles que es "un paso fundamental" para la comunidad autónoma que España exija a los viajeros internacionales procedentes de países de riesgo que tengan una prueba de PCR negativa en las 72 horas previas a la llegada para poder entrar en el país.
Así lo ha expresado la presidenta en una rueda de prensa en el Consolat de Mar, donde ha valorado los acuerdos de la reunión por videoconferencia del Consejo Interterritorial de Sistema Nacional de Salud, que han presidido el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y la ministra de Política Territorial y Función pública, Carolina Darías.
"Hoy es un día de estos que piensas que vale la pena hacer trabajo por cosas que son necesarias para nuestras islas", ha celebrado Armengol.
La presidenta ha recordado que esta es una medida que "se ha luchado desde el principio" desde el Govern y de forma conjunta con los consells insulares. "Hoy se ha acordado y es un paso fundamental para esta comunidad autónoma que es que todas las personas que lleguen de países de riesgo lo hagan con una PCR negativa", ha señalado.
Según Armengol, se trata de un acuerdo necesario "para la protección de la ciudadanía debido a la movilidad internacional" de las Islas, puesto que "en un año normal ocho de cada día 10 pasajeros que llegan a Baleares son turistas extranjeros".
En el caso de la Unión Europa y países de la zona Schengen, los países de riesgo son aquellos con una incidencia acumulada a 14 días de 150 por cada 100.000 habitantes. En cuanto al resto de países, la referencia básica también será la incidencia acumulada según los criterios de la UE.
Asimismo, ha asegurado que el Ejecutivo autonómico seguirá trabajando para que exista la posibilidad controlar entradas y salidas de pasajeros de otras comunidades autónomas.
VALORACIÓN DE LA VACUNA
Respecto a la vacuna, Armengol ha explicado también que Illa ha anunciado que en los próximos días la UE cerrará un contrato para la compra de la vacuna de las farmacéuticas Pfizer y BioNTech, que sería eficaz en un 90% de los casos y podría empezar a distribuirse durante la primera mitad del 2021. Al Estado le corresponderían unos 20 millones de vacunas.
Asimismo, Armengol ha apuntado que, según las previsiones del ministro, en el mes de mayo un porcentaje elevado de la población española y europea estaría vacunada.
"La reunión de hoy y los acuerdos tomados nos guían para seguir trabajando en los próximos meses para poder vencer a la enfermedad y también para poder recuperar la actividad económica de nuestra comunidad", ha expresado, a la vez que ha añadido que no hay una cifra estimada de las vacunas que llegarían a las Islas.
La presidenta del Govern ha hecho "una valoración positiva con toda la precaución" y ha señalado que mientras no haya vacuna se debe continuar con la estrategia de rastreo, mantener el sistema sanitario en buenas condiciones y el aislamiento de las personas contagiadas.
En este sentido, también ha hecho referencia a las medidas de restricción que hay en estos momentos en lugares como Manacor, donde está establecido el confinamiento. Preguntada por la falta de efectivos en el municipio para hacer cumplir estas restricciones, la presidenta ha asegurado que desde la Conselleria de Administraciones Públicas se está trabajando con la policía local para estudiar la posibilidad de que otros municipios ayuden al cuerpo.