La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha destacado, este lunes, que Baleares "tendrá el ciclo inversor más alto de su historia". Durante la reunión con representantes de la sociedad civil y del sector económico en un acto en el Consolat de Mar, la presidenta del Govern ha concretado que el anuncio por parte del Gobierno de la aprobación de nuevas deducciones fiscales específicas dentro del Régimen Especial de Baleares (REB) movilizará más de 349 millones de euros, con 208 millones de euros en incentivos fiscales que beneficiarán a 47.000 empresas y 71.000 autónomos.
De este modo, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023 incorporará la parte fiscal del REB, que supondrá una deducción del 90% de la base imposible en el Impuesto de Sociedades e Impuesto de la Renta de no residentes para inversiones que fomenten la actividad productiva y la creación de empleo en Baleares; y una bonificación de un 10 a un 20% para la venta de bienes corporales producidos en Baleares en actividades industriales, ganaderas, agrícolas o pesqueras.
Armengol ha agradecido a los presentes la "capacidad de lucha" en la reivindicación de esta parte fiscal del REB. "Gracias a todos vosotros, el Estado ha reconocido la dificultad de las Islas. No es un logro sólo del Govern, es un objetivo en el que hemos luchado como sociedad", ha subrayado.
En palabras de la presidenta, se completa de este modo el "mayor ciclo inversor" de Baleares, que repercutirá en que las Islas tendrán "más recursos públicos en su historia democrática y también más recursos privados, que deben venir con más justicia social y creación de más puestos de trabajo de calidad". En este sentido, ha destacado los 1.600 millones de fondos europeos que ya gestiona Baleares. Al comienzo de su exposición, la presidenta del Govern ha recordado la "situación compleja" vivida en las Islas en esta legislatura con la pandemia, que supuso la caída del 21 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) en Baleares. A pesar de ello, Armengol ha ensalzado la gestión del Govern para "crear un buen escudo social".
A continuación, ha indicado que "por si no fuese poco" ha estallado la guerra de Rusia contra Ucrania, "algo que ha creado una situación complicada". "Como Govern somos conscientes de esta situación estableciendo una hoja de ruta con los agentes sociales y económicos de estas islas con unas medidas. Estaremos juntos buscando soluciones", ha aseverado. Con todo, la dirigente balear ha resaltado que las Islas están "en una buena situación económica que debe transformar en algo mejor" porque, en sus palabras, "estamos ante una gran oportunidad inversora".
Por su parte, el vicepresidente del Govern y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, ha defendido que Baleares ha dado "un paso más" hacia el reconocimiento de su insularidad por parte del Gobierno. Así, ha destacado el trabajo "intenso" realizado desde el Govern de coalición por "este reconocimiento insular, tal y como refleja todo lo conseguido a lo largo de la legislatura como, por ejemplo, con la PAC".
Según Yllanes, el régimen fiscal es "una medida imprescindible" para continuar con el objetivo de diversificar la economía del archipiélago hacia sectores productivos que generan valor añadido. "En la legislatura más complicada de la democracia, es evidente que todos hemos puesto nuestros esfuerzos para salir de esta situación", ha afirmado.
Igualmente, el vicepresidente del Govern ha recordado su defensa durante su etapa como diputado en el Congreso: "Este REB era absolutamente esencial para poner a Baleares a la misma altura que el resto de comunidades autónomas". "Todos los sectores productivos de estas islas saldrán beneficiadas con este anuncio", ha destacado, a la vez que ha subrayado el trabajo de los dos gobiernos de coalición, estatal y autonómico.
A continuación, la consellera de Asuntos Sociales y Deportes, Fina Santiago, ha considerado que el reconocimiento del REB "es una buenísima noticia para la economía balear para mejorar la productividad de nuestras empresas". Santiago ha asegurado que esta medida "debe mejorar la bajada de precios, la competencia entre las empresas y repercutir en unos sueldos más buenos para los ciudadanos, que es fundamental para la calidad de vida". Además de agradecer el "esfuerzo y trabajo" del tercer sector durante la crisis por la pandemia de la COVID, la consellera Santiago ha recalcado el "compromiso de seguir resolviendo las cosas de una forma conjunta, que es la cogobernanza".