La secretaria general del PSIB, Francina Armengol, ha subrayado la necesidad de pedir disculpas a los militantes del partido a nivel nacional, "a sus votantes y a los no votantes", por "el espectáculo que estamos dando" y que, ha lamentado, "no está a la altura de las circunstancias en los 137 años de historia de la formación".
Así se ha pronunciado tras la dimisión, esta semana, de 17 miembros de la Comisión Ejecutiva Federal del partido para forzar la caída de su secretario general, Pedro Sánchez, aseverando no poder "entender que 17 personas tiren abajo lo que democráticamente eligieron miles de militantes" ya que "hay que ser coherente con lo prometido a los ciudadanos".
Ante más de cincuenta integrantes de la formación antes del Consejo Político extraordinario convocado para esta tarde, la dirigente socialista ha aseverado que no defenderá "nunca que otro compañero haga otra cosa que no haya sido aplicada en mi casa. Me parece insolidario", haciendo hincapié en la necesidad de "ser coherentes con nuestros principios e ideas, con nuestra historia".
No obstante, ha aseverado que "si algún compañero piensa diferente, no lo menospreciéis. Sus opiniones son absolutamente respetables y todos tenemos dudas. Tiene que haber generosidad entre compañeros y un debate fructífero".
Armengol ha lamentado que el PSOE no haya tenido "capacidad de definir un proyecto político para España", si bien ha asegurado que "seremos fuertes y valientes" a la hora de "impulsar el gobierno del cambio". La también presidenta del Govern ha insistido en que "no deberíamos estar en esta situación de estancamiento" y ha apelado a entendernos entre nosotros mismos para definir el proyecto del conjunto de la ciudadanía".
En este contexto, ha reclamado que "sigamos defendiendo un 'no' rotundo a un gobierno de derechas en España. Os lo pido. Digo 'no' a Mariano Rajoy porque estoy en un partido que nació para luchar contra las políticas de la derecha" y que constituye "una parte muy importante en el engranaje de la política española".
Todo ello en un panorama en el que "han aparecido otras formaciones" y dentro del cual "me gustaría analizar qué nos está pasando y dónde estamos perdiendo votos".
Sí se ha mostrado convencida de que "la gente pide más capacidad de democracia, participación en la toma de decisiones y de escuchar lo que nos dicen los ciudadanos". "Somos un partido cargado de ideología, que nació como un instrumento útil para cambiar la sociedad, defender la libertad, a la gente más vulnerable, la igualdad y la justicia social", ha incidido.