Autoridades, representantes políticos y ciudadanos han participado a mediodía de este jueves ante las sedes de diversas instituciones en los minutos de silencio convocados para condenar el asesinato ayer en Palma de una mujer a manos de su compañero sentimental.
El alcalde de la capital balear, Jose Hila, ha encabezado el acto celebrado en Cort, en el que han participado otros responsables municipales y varios miembros del Govern, como el vicepresidente Biel Barceló.
"No queremos que vuelva a ocurrir un hecho como el de ayer. Quiero mostrar el compromiso de este ayuntamiento en la lucha contra esta lacra, un compromiso que tiene que ser de todo el mundo", ha subrayado el alcalde.
También ante la sede de la Delegación del Gobierno se ha celebrado un acto silencioso de repulsa por el asesinato al que han asistido la presidenta del Parlament, Xelo Huertas, la portavoz del Govern, Pilar Costa, la directora del Instituto Balear de la Mujer, Rosa Cursach, y el secretario general de la representación del ejecutivo central en Baleares, Evelio Antich.
Antich ha expresado su esperanza de que los partidos con representación en el Congreso consensúen un pacto de estado contra la violencia de género que permita avanzar hacia la erradicación de las agresiones machistas.
El Consell de Mallorca ha convocado también minutos de silencio a las 12.00 horas en todas sus sedes, incluida la principal de Palau Reial, en la que ha participado el presidente insular, Miquel Ensenyat.
La Universidad de las Islas Baleares (UIB) ha convocado actos de repulsa en el campus de Palma y en sus sedes de Menorca y las Pitiusas.
El Ayuntamiento de Manacor también ha celebrado un minuto de silencio en la casa consistorial para condenar el asesinato y expresar sus condolencia a la familia y amigos de la sexta víctima mortal de la violencia machista en 2016 en Baleares.
El sindicato CCOO ha sido otra de las entidades que ha expresado su repulsa por el crimen de ayer, "que debe ser un punto de inflexión en la toma de conciencia y en la lucha contra esta lacra social". EFE