El Ayuntamiento de Palma prevé construir 363 viviendas en solares municipales en régimen de alquiler a precio limitado para los residentes de la capital balear, dentro de la primera fase del plan de choque de vivienda que prepara el Consistorio para hacer frente a la emergencia habitacional.
El Ayuntamiento pone así a disposición de los promotores interesados seis parcelas municipales para la construcción de viviendas en los barrios de Coll de'n Rabassa, Camp Redó, Nou Llevant, Son Ferragut, y Sa Indioteria. Unas viviendas que tendrán entre uno y tres dormitorios y serán de 45 a 70 metros cuadrados. "El precio será un 30 por ciento más barato que la media del precio de mercado", según ha anunciado este miércoles el alcalde de Palma, Jaime Martínez, tras la junta de gobierno municipal.
También se creará "un registro especial" para los interesados. Un 30 por ciento de esas viviendas irán destinadas a jóvenes de menores de 35 años, un 10 por ciento a mayores de 65 años y otro 10 por ciento a familias monoparentales. Además, uno de los requisitos será estar empadronado en Palma un mínimo de cinco años, según ha explicado el regidor de Urbanismo de Palma es Óscar Fidalgo.
El Ayuntamiento espera que a principios del año que viene se puedan presentar el resto de viviendas públicas para llegar a las 1.200 previstas en el plan de choque municipal.