La Conselleria de Educación pretende prohibir el uso de teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos en todos los colegios e institutos de Baleares, que estarían siempre limitados en las aulas de primaria, aunque se ofrecerían excepciones con finalidades educativas en ESO y Bachillerato. Así se desprende del primer borrador que la dirección general de planificación, ordenación e infraestructuras ha presentado a la Mesa del Alumnado.
De esta forma, los móviles estarán vetados durante todo el horario lectivo, tanto en clase, como en el recreo y durante las actividades extraescolares. Las únicas excepciones que se contemplan a día de hoy están relacionadas con razones médicas, como pueden ser las aplicaciones para llevar un control completo de la diabetes. Solo en ESO y Bachillerato se podría permitir su utilización en alguna actividad de tipo pedagógico determinada por el profesorado.
Los diez representantes de los estudiantes de secundaria de todas las islas que forman parte de la Mesa del Alumnado han mostrado su apoyo a la prohibición. Las medidas correctoras estarán en mano de cada centro educativo, que podría retirar los teléfonos móviles durante horas o días o, incluso, llegar a expulsar a los alumnos. El Govern pretende alcanzar unas instrucciones comunes y un consenso entre colegios e institutos, manteniendo su autonomía.
La regulación podría entrar en vigor este mismo curso y se aplicaría en los centros públicos y concertados. La Conselleria trasladará el borrador a toda la comunidad educativa con la intención de conseguir el mayor consenso posible.