La ley balear de residuos del 2019 ha entrado en vigor este 20 de marzo con múltiples restricciones para fomentar la economía circular. Sin embargo, muchas empresas cuentan con productos en 'stock' a los que no han podido dar salida debido a la crisis provocada por la pandemia, por lo que critican los plazos elegidos para la aplicación de la normativa.