El Ayuntamiento de Palma ha destinado 500.000 euros a las subvenciones para la rehabilitación de edificios en los barrios vulnerables de Palma, que tienen por objetivo mejorar la seguridad y la habitabilidad de las fincas residenciales.
En una rueda de prensa, la regidora de Modelo de Ciudad, Sostenibilidad y Vivienda Digna, Neus Truyol, ha explicado que los barrios que se benefician de estas ayudas, que se otorgan desde hace años, son Camp Redó, Son Gotleu y Verge de Lluc.
Asimismo, ha señalado que este 2021 han recibido 39 solicitudes de las que se han aprobado 20, seis han sido rechazadas por no cumplir con los requisitos y 13 quedas denegadas provisionalmente, a la espera de que presenten alegaciones.
Truyol ha indicado que estas subvenciones sirven para dignificar los barrios "con una degradación arquitectónica patente" y para crear cohesión, así como fortalecer las comunidades de vecinos. De igual modo, ayudan a mejorar el confort y la seguridad de las fincas.
Ha afirmado que muchos de los edificios que han sido reformados gracias a estas subvenciones o que son susceptibles de recibir dichas ayudas presentan problemas en las instalaciones de suministro o la necesidad de una revisión de la estructura. También la obligatoriedad de hacer un Informe de evaluación del Edificio (IAE).
Truyol ha explicado que la convocatoria tiene dos líneas de actuación. La línea A contempla una ayuda máxima de 30.000 euros y sirve para actuaciones resultantes de un IAE desfavorable o de una orden de ejecución abierta por Disciplina Urbanística.
También para la rehabilitación de problemas que afecten a la seguridad constructiva y funcional de las fachadas y de otros elementos comunes.
En cuanto a la línea B, contempla una ayuda máxima de 20.000 euros. El tipo de obras que cubre es la adecuación y afianzamiento de las zonas privadas de uso público entre bloques necesarias para asegurar la integridad de los transeúntes.