Emaya ha finalizado las tareas de excavación del colector interceptor de recogida de aguas residuales que, junto al tanque de tormentas, evitará vertidos en el mar y el cierre de playas como Can Pere Antoni o Ciudad Jardín.
Según ha explicado Emaya este miércoles en nota de prensa, está previsto que la infraestructura empiece a funcionar a partir de este verano. Asimismo, para el alcalde de Palma, José Hila, este hecho "da solución a un problema histórico de la ciudad".
"Se trata de una de las obras de ingeniería más importantes de Palma que está llegando al final, podemos estar muy contentos porque este verano se evitará el 90 por ciento de los cierres de estas playas", ha añadido.
Por su parte, el conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, ha señalado que el colector "es la muestra de cómo la corresponsabilidad entre instituciones sirve para arreglar los problemas que preocupan a la ciudadanía y mejorar la gestión del ciclo del agua y del medio".
LA EXCAVACIÓN
Concretamente, se ha excavado el último tramo del túnel por donde discurrirá el colector interceptor. Se trata de un tramo de 480 metros ubicado entre el pozo de la calle l'Hort de les Ànimes y el pozo de recepción situado al lado de la depuradora.
Así, este miércoles se completará la excavación de los cinco tramos en los que se ha dividido la obra de 3,07 kilómetros y que separa la depuradora EDAR 2, en el Coll d'en Rabassa, con el punto de inicio de esta infraestructura en Avenidas. El rendimiento de la excavación ha sido de 12 metros diarios.
El primer tramo, de 716 metros, se excavó entre julio y diciembre de 2020. Posteriormente, en febrero de 2021 se excavó el tramo más corto, de 155 metros, y en julio finalizó la excavación del más largo, de 933. Además, entre agosto y septiembre se completó el cuarto tramo, de 766 metros.
La infraestructura cuenta también con tres pozos de ataque y otros tres de recepción, y con una gran tubería de hormigón armado de dos metros de diámetro interior por donde transcurrirán las aguas residuales.
Una vez completada la excavación, los trabajos se centrarán en las nuevas arquetas de inspección y mantenimiento ubicadas a lo largo del trazado. La última actuación será la conexión a la red del pozo situada en la avenida Gabriel Alomar, prevista para primavera de 2022.
EVITAR VERTIDOS AL MAR
La construcción forma parte del proyecto conjunto de colector interceptor y depósito de tormenta, una infraestructura destinada a recoger, conducir y almacenar aguas residuales para depurarlas y evitar vertidos a la bahía de Palma en caso de lluvias.
Ambas infraestructuras permitirán reducir en un 90 por ciento los cierres de las playas de Can Pere Antoni y Ciudad Jardí, han destacado.
En total, las obras han contado con un presupuesto de más de 27 millones de euros y han generado una media de 40 puestos de trabajo directos. La financiación la ha aportado la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio. El proyecto se modificó ligeramente para adaptarlo a la nueva depuradora que se construirá a cargo del Ministerio de Transición Ecológica.