Los partidos de la Selección Española de Fútbol normalmente unen a toda la sociedad, que se aúnan todos bajo la bandera para ver ganar a La Roja. Sin embargo, el colegio La Salle de Palma ha levantado la polémica al expulsar a 30 alumnos de una clase de primero de Bachillerato por colgar una bandera en apoyo a los de Luis Enrique en este Mundial de Qatar 2022.
Según ha denunciado Sergio Campoy, uno de los padres de los estudiantes expulsados, el problema surgió cuando la profesora de Catalán mostró su descontento a que la bandera de España estuviese colgada en el aula, tal y como han contado los diarios 'Última Hora' y 'Diario de Mallorca'.
El padre escribió en las redes sociales que la decisión de retirar la bandera española obedece a "connotaciones políticas". Y se pregunta: "¿Quiénes son los adultos? Hasta cuándo este adoctrinamiento sinsentido".
Además, Campoy continúa explicando que los padres han puesto el suceso en manos de Inspección Educativa porque "aparte de tratar de ensuciar un gesto espontáneo y deportivo, profesores y colegio La Salle de Palma", el centro "ha incumplido los protocolos al enviar a menores a casa sin comunicarlo a los padres".
Por su parte, el padre de uno de estos 30 menores expulsados, confirma que los niños pidieron permiso a su tutor, y este se lo concedió, antes de colgar la bandera de España en su clase.
Asimismo, los alumnos han apuntado que cuando la profesora de Catalán vio la bandera española en la pared, decidió suspender la clase y abandonar el aula.
Por otro lado, el colegio ha justificado la expulsión de los menores a través de una circular en la que sostiene que desobedecieron y se enfrentaron con la docente. "A raíz de una iniciativa por parte de los alumnos para decorar el aula en apoyo a la selección española masculina absoluta de fútbol en su participación en el Mundial, los alumnos de 1ºB, actuando como grupo, han desoído las indicaciones de una profesora que estaba cumpliendo con las normas de convivencia del centro y seguía las órdenes del equipo directivo, negándose aquellos expresamente a desobedecer, lo que supone un acto de insubordinación deliberada", dicen.
Además, el centro asegura en su comunicado que "actuando como masa han coaccionado a una compañera que sí ha hecho intento de obedecer a la profesora".
Ante estos hechos, el grupo parlamentario Vox ha censurado lo ocurrido y ha instado a la comparecencia en el Parlament del conseller de Educación, Martí March, para explicar los sucedido.