El fiscal superior de Baleares, Bartomeu Barceló, ha asegurado este miércoles que "se están revisando ya" las medidas de seguridad del fiscal Anticorrupción Miguel Ángel Subirán, que investiga el caso de presunta corrupción en la policía local y el llamado caso Cursach.
En declaraciones realizadas a las puertas de la Fiscalía de Baleares, antes de asistir a una reunión con el fiscal jefe Anticorrupción, Manuel Moix, Barceló ha indicado que dichas medidas de seguridad están siendo evaluadas.
Tanto el juez que instruye estas causas, como el fiscal y varios testigos han sufrido amenazas durante el procedimiento, según ha recogido el propio instructor, Manuel Penalva, en varios autos de la causa.
Barceló se ha referido también a la posible incompatibilidad del fiscal Anticorrupción en excedencia Pedro Horrach al representar como abogado defensor a uno de los investigados en esta causa y ha señalado que se está estudiando.
Sobre el análisis "respecto a su actuación como abogado en una causa en que ha intervenido como fiscal", Barceló ha dicho que "parece ser que hay varias actuaciones" y que se están recopilando, pero ha advertido de que se trata de "una causa extensa" y dicha labor requiere tiempo "para ver si efectivamente ha intervenido y la intensidad de la intervención".
Barceló ha planteado que abordará esta cuestión con el fiscal Moix, por si se debe plantear una queja en el caso de que se detecte incompatibilidad y si debería plantearla la Fiscalía de Baleares o Anticorrupción.
"El fiscal Horrach no es tonto y seguro que conoce perfectamente hasta dónde puede llegar", ha agregado Barceló, quien ha precisado que, en todo caso, la incompatibilidad afectaría a su actuación como abogado y "corresponde conocerla, en su caso, al Colegio de Abogados, no a la Fiscalía".
Ha añadido: "Si nosotros consideráramos que hay una incompatibilidad, se tiene que remitir, a los efectos oportunos, al Colegio de Abogados".