El Govern balear y los Consells insulars se han reunido este jueves para abordar el aumento de la presión migratoria en el archipiélago, donde esta semana han sido rescatados más de 611 migrantes. Tras el encuentro, que ha durado más de dos horas, la presidenta balear, Marga Prohens, ha dejado claro que los recursos de las islas son "insuficientes" para dar respuesta a las necesidades de los migrantes que arriesgan sus vidas en el mar para llegar a las costas de las islas. "No podemos seguir atendiendo a los menores en condiciones dignas", ha asegurado Prohens.
En la misma línea, el presidente del Consell de Mallorca, ha advertido que los centros de acogida de menores migrantes de la isla "están sufriendo una sobreocupación del 40 por ciento", por lo que ha pedido de manera urgente al Gobierno central más espacios para evitar que Baleares viva la misma situación que Canarias.
Tanto el Ejecutivo Autonómico como los Consells han cargado duramente contra la gestión de la crisis migratoria por parte del Gobierno de Pedro Sánchez, al que ya han pedido en varias ocasiones ayuda para solucionar la presión migratoria que viven las islas, según ha defendido el presidente del Consell de Menorca es Dolfo Vilafranca.
La situación preocupa especialmente en Ibiza y Formentera, por la incesante llegada de menores migrantes no acompañados, 15 de ellos llegados el martes. El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, ha insistido en la necesidad de regular la llegada de esos migrantes y ha hablado incluso de "invasión y saturación".
Por su parte, el presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba, ha alertado de que la presión de los servicios de la isla es "insostenible" y ha exigido soluciones para hacer frente a la crisis migratoria en Baleares. Una crisis migratoria que se ha acrecentado esta última semana en Baleares, con la llegada de 611 migrantes en varias pateras localizadas en las inmediaciones de Formentera, Cabrera y al sur de Mallorca.
