CORT

Jaime Martínez consigue desbloquear la situación del ayuntamiento de Palma, gracias a la izquierda y el apoyo parcial de Vox

El Ayuntamiento de Palma ha desbloqueado este viernes la situación de Cort con la votación de las propuestas de organización del gobierno municipal del PP en un pleno extraordinario. Aún así, Vox critica el reparto de oficinas en el Consistorio y el PP niega que haya habido alguna "moneda de cambio" con la izquierda.

Europa Press | Elka Dimitrova

Palma | 07.07.2023 13:03

Jaime Martínez, alcalde de Palma, en los estudios de Onda Cero Mallorca
Jaime Martínez, alcalde de Palma, en los estudios de Onda Cero Mallorca | Martí Rodríguez

El Ayuntamiento de Palma ha aprobado este viernes, en una sesión plenaria extraordinaria, las propuestas de organización del gobierno municipal del PP con distintos apoyos o abstenciones en cada uno de los puntos por parte de los grupos de la izquierda y de Vox. El primer teniente de alcalde de Cort, Javier Bonet, ha asegurado tras el pleno que este viernes "se han asentado las bases para que la oposición tenga todas las herramientas para hacer su tarea".

En esta línea, Bonet ha defendido que el gobierno municipal es "totalmente sostenible" y que un 85 por ciento de las tareas que lleva a cabo el Ayuntamiento "no son de izquierdas ni de derechas". El teniente de alcalde tambiénha reconocido que con el resto de medidas tendrán que "sentarse con los grupos municipales, más tiempo del que antes era necesario, para llegar a acuerdos".

En concreto, en el pleno extraordinario se han aprobado los nombramientos de los consejos de administración de la Empresa Municipal de Agua y Alcantarillado (Emaya), de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), de la Sociedad Municipal de Aparcamientos y Proyectos (SMAP) y de la Empresa Funeraria Municipal (EFM). En estos nombramientos de los consejos de administración el PP ha mostrado su voto favorable, los grupos MÉS per Palma, PSOE y Unidas Podemos se han abstenido y Vox ha votado en contra. De hecho, en relación a este punto, Vox ha presentado una enmienda para la modificación de los estatutos de las empresas municipales para que "el numero de miembros del consejo de administración de estas cuatro empresas sea proporcional al número de concejales del pleno municipal".

Vox ha pedido que se "rectifique la composición propuesta de los miembros del consejo de administración" y que "exista proporcionalidad en la representación". Así, han propuesto una modificación de forma que el PP tuviera tres representantes; el PSOE, dos; Vox, dos; y MÉS per Palma y Unidas Podemos, uno. Esta enmienda de Vox ha sido rechazada por el pleno y, por ello, este grupo municipal ha votado en contra de los puntos relativos a las cuatro empresas públicas al considerar que el reparto de asientos "no es proporcional a la representación del PP en Cort".

Por su parte, el PSOE Palma ha manifestado que esta formación "no va a formar parte del pulso por el poder que mantiene el PP con Vox". Así, han indicado que "se traslada una imagen totalmente nefasta a la ciudadanía, que no entiende absolutamente nada de lo que están haciendo". "Una muestra de debilidad del alcalde, una situación débil que pasa factura a la ciudad", ha añadido el regidor socialista Francisco Ducrós.

En el pleno se han aprobado también las retribuciones económicas de los regidores y los nombramientos de las comisiones permanentes del pleno con el apoyo de la izquierda y la abstención de Vox que, ha señalado, quiere "dar un voto de confianza a la propuesta". Por otra parte, el grupo municipal de Vox ha criticado el reparto de espacio de los despachos en Cort y ha preguntado al PP "el motivo por el cual se está dando tanto espacio al PSOE y a MÉS per Palma" cuando a Vox "se le dan solo 45 metros cuadrados siendo seis concejales y a MÉS cuatro metros menos siendo la mitad de concejales".

En esta línea, por parte de Vox, Gari Durán ha preguntado si "ha sido una moneda de cambio en el reparto" para que el PP obtuviera los votos favorables en el pleno. No obstante, el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Palma, Javier Bonet, ha negado esto asegurando que "no hay ninguna moneda de cambio" y que "ha sido un reparto en el que ha habido acuerdo con los diferentes grupos".