El joven acusado de dirigir una patera de Argelia a Cabrera dice que era un pasajero más. En Palma, ha comenzado el juicio a un joven acusado de dirigir una patera con 31 migrantes a bordo, diez de ellos menores, que ha negado que fuera patrón.
El acusado, de 22 años, ha defendido que viajó en la patera como pasajero, tras pagar unos 1.700 euros. En la embarcación, que salió de Argelia y se quedó a la deriva en aguas de la isla de Cabrera, viajaban una treintena de migrantes. La Fiscalía solicita para el joven seis años de prisión por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
El Ministerio Público sostiene que el acusado había sido designado como conductor de la embarcación por parte de una mafia asentada en Argelia dedicada de forma profesionalizada a este tipo de viajes.
Además, el fiscal ha destacado el riesgo que corrieron los migrantes a bordo. Dentro de la embarcación había cinco chalecos para niños y algunos más para adultos, pero totalmente insuficientes para la cantidad de personas que viajaban a bordo.
