Un tribunal popular ha declarado este lunes culpables del asesinato con alevosía de Andrés C., ocurrido en Alaró el 30 de junio de 2013, a su hijo, Andreu C.T., de 20 años, y a un amigo suyo, Francisco A.R., de 21, que habían confesado el crimen esta mañana durante su declaración en el juicio.
Tras la lectura del veredicto de culpabilidad, la Fiscalía y la acusación particular (que ejerce una hermana del fallecido y tía del principal acusado), han reiterado su petición de una condena de 17 años, 6 meses y 1 día de prisión para Andreu, con la agravante de parentesco, y de 16 años y 6 meses para Francisco, y el juicio ha quedado visto para sentencia.
Piden además una indemnización de 90.000 euros para la hermana del fallecido y que el hijo de la víctima sea declarado "indigno" para sucederle. También la prohibición de que Andreu se aproxime a menos de 500 metros de su tía o se comunique con ella durante 25 años, 24 en el caso de Francisco.
Acusaciones y defensas han alcanzado un acuerdo previo al juicio que se ha celebrado este lunes en la Audiencia de Palma, basado en la confesión de ambos acusados, que llevan casi dos años en prisión y que han pedido perdón a sus familias por lo que hicieron.
Han admitido ante el jurado que atacaron al hombre con varias armas, entre ellas un palo con clavos y un martillo, y que le golpearon en la cabeza y el cuerpo por sorpresa, simultáneamente, "muchas" veces, "desde distintos ángulos" y sin que pudiera defenderse, en su domicilio familiar de Alaró.
Después de matarlo, metieron el cadáver en su vehículo todoterreno y abandonaron el cuerpo en un descampado.
Además han contado que el día anterior al asesinato ya le habían atacado en su dormitorio, después de darle unos somníferos, pero el hombre se defendió somnoliento, por lo que huyeron y desistieron de su intención.
"Lamento de corazón todo lo que hice", ha dicho Andreu. El otro acusado también ha pedido perdón a la familia del fallecido y a la suya propia, por hacerles pasar por esta situación, y ha expresado su "arrepentimiento sincero".
Tras la admisión de los hechos, las acusaciones han retirado el ensañamiento pero han mantenido la acusación por asesinato con alevosía y han rebajado las peticiones de pena que en un principio eran de 25 años para el hijo del fallecido y de 22,5 años de prisión para su amigo.