Caty Rigo y sus tres hijos pequeños han conseguido tocar suelo español. "Estamos enormemente felices de estar aquí", ha asegurado Caty Rigo al aterrizar en el aeropuerto de Barcelona, después de haber comprado un segundo vuelo comercial que la sacara de Israel. Tras pedir auxilio en Onda Cero, Caty ha conseguido llegar a Barcelona en un vuelo comercial, aunque deja atrás a su marido, familiares y amigos. "Estamos enormemente felices de estar aquí, pero es muy difícil por todo lo que dejamos atrás", cuenta.
La mallorquina Caty Rigo, casada con un israelí, se mostró desesperada en los micrófonos del programa Más de uno Mallorca de Onda Cero porque su vuelo con destino a Palma había sido cancelado.
Sin embargo, la familia de Caty ha conseguido comprar otro pasaje con la aerolínea israelí que por fin le ha traído a España vía Barcelona. Está "feliz" junto a sus tres hijos pequeños, pero también admite que "es muy difícil por todo lo que dejamos atrás". "Ha sido una semana muy intensa y difícil", cuenta Caty en un mensaje de Whatsapp nada más pisar suelo español y a la espera de coger otro vuelo con destino a Palma.
La emoción ha sido tal que parte de la familia mallorquina de Caty ha querido trasladarse al aeropuerto de Barcelona para darle la bienvenida a sus hijos y a ella. El encargado de recibirles en la ciudad condal y acompañarles hasta Palma en otro avión ha sido su hermano Marc.
Esta mallorquina, que lleva doce años residiendo en Israel, admite que desea volver al país de acogida cuando termine el conflicto, pero que, de momento, desea alejar a sus hijos de la zona de guerra. Deja atrás a su marido y padre de sus hijos, pero también a otros familiares, amigos y compañeros de trabajo; toda una vida truncada por la guerra que ya se ha cobrado miles de vidas y que promete convertirse en una guerra larga.
Son muchos los españoles que continúan en Israel y Gaza sin opción de abandonar el lugar, por lo que la historia de Caty Rigo y su familia debe servir de ejemplo para no perder de vista a todos aquellos que desean volver a su país de origen y alejarse del conflicto.
