Piden 30 años de cárcel a un hombre acusado de asesinar al padre de su expareja y de robarle dinero
Los hechos ocurrieron en Sencelles cuando el acusado se dirigió a la casa familiar de su expareja, con quien tenía una hija menor, con el objetivo de obtener alguna cantidad de dinero.
El Tribunal del Jurado de la Audiencia Provincial de Baleares juzgará a partir de este lunes a un hombre de 42 años acusado de asesinar al padre de su expareja y de robarle una cantidad desconocida de dinero en Sencelles, en mayo de 2017.
Por ello, la Fiscalía pide un total de 30 años de prisión --25 por el asesinato con alevosía y ensañamiento y 5 por el robo con violencia e intimidación--, además de una indemnización de 100.000 euros a la hija del fallecido --su expareja-- y de 75.000 a los padres.
Según el escrito del fiscal, los hechos ocurrieron cuando el acusado se dirigió a la casa familiar de su expareja, con quien tenía una hija menor, con el objetivo de obtener alguna cantidad de dinero.
En dicha vivienda se encontraba el padre, quien le abrió la puerta y le dejó entrar. Una vez dentro, la víctima se negó a entregarle la cantidad de dinero que el acusado le pidió.
Motivado por la negativa, el acusado le golpeó múltiples veces con un recipiente de cerámica y una olla y, seguidamente, le atestó diversas puñaladas con un cuchillo hasta causarle la muerte.
El Ministerio Público ha realzado en su escrito que el acusado le produjo un "gran sufrimiento" a consecuencia del número de lesiones que le produjo y, además, que el hombre tenía reconocida una minusvalía física del 43 por ciento.
Según continúa el relato de la Fiscalía, después de asesinarlo, el investigado revolvió toda la casa y se apoderó de un recipiente que contenía una cantidad de desconocida de dinero y el teléfono móvil de la víctima. Después se marchó del lugar.
Con todo, la Fiscalía pide los 30 años de cárcel en conjunto y ambas indemnizaciones y, asimismo, impone una medida de libertad vigilada por un tiempo de diez años posteriores a la condena y la prohibición de comunicarse por cualquier medio o aproximarse a menos de 1.000 metros de su expareja y su hija.