La Policía Local de Calvià ha interpuesto 50 denuncias por ruido en las zonas de Magaluf y Santa Ponça en las dos últimas semanas.
Ambos supuestos son considerados infracciones graves por la ley contra la contaminación acústica y la ordenanza reguladora de los horarios de cierre de establecimientos y espectáculos públicos.
Por el exceso de ruido la multa puede llegar hasta los 12.000 euros y 10.000 euros por mantener las terrazas abiertas más allá del horario permitido.
Según el comunicado, las asociaciones de vecinos han trasladado su malestar en varias ocasiones por el ruido durante la campaña estival.
La Policía Local destaca la dificultad de mantener un equilibrio entre el descanso de los residentes y las actividades de ocio de estas zonas.
Ante esta situación, el Ajuntament de Calvià ha puesto en marcha campañas gráficas para informar sobre las multas por comportamientos incívicos como, por ejemplo, chillar por la calle, que puede ser sancionado con hasta 400 euros.