El 54% de las personas que ejercen la prostitución en Palma lo hacen en pisos o casas, y el 45% está en situación administrativa irregular, lo que supone un grave obstáculo para que puedan acceder a un trabajo normalizado.
Son datos de la Memoria 2021 de la Red de Atención Directa a personas en situación de prostitución de Palma, que ha presentado este viernes el regidor de Justicia Social, Feminismo y LGTBI del Ayuntamiento, Alberto Jarabo, junto a representantes de entidades de la red.
La memoria pone de manifiesto que, tras la pandemia, ha aumentado la "deslocalización" de la prostitución, que se ha trasladado de clubes hacia pisos y casas. Éstos han pasado de representar un tercio de los lugares de prostitución a más de la mitad; el 34% de las personas atendidas por la red ejerce en la calle y un 10% en clubes. Además, un 2% ejerce la prostitución ofreciéndola por Internet y desplazándose al lugar que requiera el cliente, lo que dificulta la atención social.
Las entidades participantes en la red --Casal Petit, Creu Roja y Médicos del Mundo-- tratan de contactar con estas personas --mayoritariamente mujeres-- y ofrecerles servicios de orientación e inserción laboral, atención psicológica y ayuda con trámites administrativos como la solicitud de tarjeta sanitaria. Sin embargo, la deslocalización de la actividad aumenta el aislamiento de estas personas.
En 2021, las entidades de la red realizaron 807 visitas, aunque en parte de ellas no pudieron contactar con las personas afectadas --principalmente porque el local estaba cerrado, pero también porque no les permitieron el paso o les dijeron que no querían nada--.
La red atendió en 2021 a 1.396 personas, de las cuales unas 200 acudieron a varias de las entidades. Un 45% de estas personas recibió durante 2021 la primera atención.
En cuanto al perfil, el 93% son mujeres cis, un 4% son mujeres trans y un 2%, hombres. La edad media se sitúa en 37,9 años, dos años más que en ejercicios anteriores. Hubo un caso de atención a una persona menor de edad.
Un total de 73 personas atendidas tiene más de 55 años; suelen ser mujeres que ejercen la prostitución desde que eran jóvenes y siguen teniendo contactos esporádicos. Las personas entre 18 y 24 años se sitúan generalmente en pisos o casas y los mayores de 55 años presentan porcentajes más elevados en los entornos de calle.
El 92% de las personas atendidas es de origen extranjero: un 55% proceden de América Latina, el 21% de África, el 9% de la Unión Europea y el 5% de Asia. Sólo el 8% tiene nacionalidad española. Los países de origen más frecuentes son Colombia, Nigeria y Brasil.
El 53% de las personas que han trabajado con las entidades tenían estudios secundarios, y un 2% no sabe leer ni escribir. Asimismo, el 45% estaba en situación administrativa irregular --y un 1% en trámites de regularización-- y el 14% no tenía cobertura sanitaria.
No todas las personas en situación de prostitución atendidas en Palma residen en la capital: un 7% procede de otros municipios. En cuanto a su vivienda, la mayoría dispone solamente de una habitación alquilada (57%), un 10% reside en un club y un 3% no dispone de un domicilio estable para vivir.
Además, un tercio de estas personas vive en el mismo espacio en el que ejerce la prostitución, lo que reduce su autonomía y posibilidades de salir de esta situación.
Por otro lado, el 54% de las personas en prostitución tiene responsabilidades familiares; el 53% tiene más de dos personas a su cargo.
EJERCER PROSTITUCIÓN NO ES POR "VOLUNTARIEDAD"
La representante de Médicos del Mundo, Belén Matesanz, ha recalcado que ejercer la prostitución no es una cuestión de "voluntariedad", sino que "son mujeres en situación muy vulnerable". "Es difícil valorar cuántas personas están en prostitución con una red detrás, porque implica un tiempo de generar confianza y vínculo para que quieran contártelo, por su propia seguridad", ha explicado.
Según Casal Petit, la entidad de referencia en cuanto a víctimas de trata, "sí que hay muchas" mujeres en situación de explotación, pero "muchas no lo quieren decir y las que acaban denunciando a la Policía son una mínima parte", ha expresado Magdalena Alomar.
Por otra parte, Joana Vives, de Creu Roja, ha atribuido el aumento de nuevos casos de prostitución atendidos a la vulnerabilidad en los países de origen agravada por la crisis y a la apertura de fronteras, ya que en 2020 muchas personas no pudieron migrar. Vives también ha explicado que la prostitución no se focaliza en barrios concretos de Palma, y que de hecho han dividido la ciudad en nueve rutas de atención diferentes.