En una nota de prensa, han subrayado que, en esta ocasión, el hotel no estará medicalizado, sino que funcionará como un establecimiento hotelero con 250 camas disponibles para pacientes positivos de COVID-19 y contactos estrechos que no puedan garantizar el aislamiento en su domicilio.
De este modo, el Servicio de Salud podrá garantizar el aislamiento de los pacientes asintomáticos, que no necesitan ingreso hospitalario pero han de estar en cuarentena durante 14 días y a quienes no les es posible porque no disponen de domicilio o no es adecuado para garantizar el aislamiento en condiciones óptimas o bien porque conviven con personas vulnerables.
Por lo tanto, se dejarán libres camas de los centros sanitarios para destinarlas a los pacientes que necesiten atención hospitalaria.
Este mismo martes se trasladarán los primeros pacientes de COVID-19 desde el Hospital Sant Joan de Déu de Palma al hotel Melià Palma Bay. Se trata del traslado programado en ambulancia de 25 pacientes autónomos, que se alojarán en la segunda planta, que dispone de 35 habitaciones de uso individual.
Este establecimiento, que se acondicionó durante la semana pasada, tiene una capacidad máxima de 250 camas, distribuidas en ocho plantas.
La Conselleria de Salud ha remarcado que, de momento, el sistema sanitario público y privado de Baleares tiene suficiente capacidad para atender las necesidades de todos los pacientes.