El PP balear ha suspendido cautelarmente de militancia a Aina Castillo, quien fuese consellera de Salud bajo el último mandato de Jaume Matas, y que le abrirá un expediente disciplinario después de que la exalto cargo admitiese ayer ante el juez José Castro haber intervenido, por orden de Matas, en el presunto amaño del proceso para la adjudicación del hospital de Son Espases.
Así lo ha anunciado este miércoles el presidente de la formación, Miquel Vidal, quien ha apuntado que, tras la tramitación del expediente, el Comité de Derechos y Garantías decidirá si acuerda la expulsión definitiva del partido.
Vidal ha comparecido ante los medios junto al secretario general del PP, Andrés Ferrer, el vicesecretario, Toni Mulet, y los portavoces de la formación en el Parlament, el Consell de Mallorca y el Ayuntamiento de Palma, para condenar los hechos que se investigan en torno a Son Espases. "El PP es un partido honesto en el que nunca ha habido cabida para las personas corruptas", ha aseverado el portavoz.