Nadal, que hizo su debut en la arcilla parisina en este 2014 en la pista Suzane Lenglen por imposición de la organización, no tuvo excesivos problemas para vencer a un rival contra el que tan solo se había visto las caras una vez --en 2005, en el ATP Masters 1000 de Madrid, con victoria de Rafa--, a pesar de que ambos jugadores son profesionales desde hace más de una década.
En este 2014, Nadal quiso eliminar fantasmas de pasados debuts en su 'Grand Slam' favorito y empezó como un rodillo, endosándole un 6-0 en poco menos de media hora al americano. El tenista de Manacor se mostró muy sólido con su saque --solo dejó a Ginepri hacerle un punto con su servicio-- y aprovechó bien sus opciones de rotura para llevarse el primer 'set'.
El buen inicio de partido hizo que Rafa Nadal jugase de manera muy sólida y subiendo el nivel conforme avanzó el partido. Profundo con la derecha, muy rápido en las transiciones defensa-ataque y no dejando que Ginepri le comiera terreno en la tierra batida de la segunda pista en importancia del torneo parisino. También dejando destellos en forma de 'passing-shot', el arma patentada del número 1 del mundo.
Durante seis juegos, los seis primeros del segundo set, hubo algo de batalla en la Lenglen. Ginepri soltó la tensión de debutar en Roland Garros ante Rafa Nadal y consiguió llevar el encuentro al 3-3. Pero hasta ahí dejó llegar Rafa Nadal a Robby Ginepri en la arcilla parisina. Como ha hecho tantas veces en estos años en París, cuando quiso cerrar el encuentro, lo hizo.
Porque a partir del séptimo juego de esa segunda manga, Nadal pisó el acelerador de su tenis y no lo soltó hasta el final del partido. Desde ese momento y hasta el final del mismo todos los juegos cayeron del lado de Rafael Nadal. Primera victoria para Nadal en su camino a su noveno Roland Garros. El siguiente rival del manacorí será el austriaco Dominic Thiem, verdugo del tenista local Paul-Henri Mathieu.