Uno de los parajes más visitados en temporada alta y considerado como una de las joyas paisajísticas de la isla, Cala Pregonda, fue días atrás el foco de atención por parte del coordinador del programa de adopción de playas del Gob Menorca, Víctor Carretero. El equipo de voluntarios de Pregonda se topó con unos residuos que inicialmente fueron confundidos por plásticos. Tras una serie de comprobaciones y el asesoramiento de la entidad ecologista se dictaminó que los plásticos eran huevos de raya y de tiburón blanco. No es la primera ocasión que estos equipos, que reciben previamente cursos de formación y un minucioso protocolo, protagonizan anécdotas, como por ejemplo la detección de un fardo de hachís en la zona norte de la isla.
Carretero reconoce que en Cala Pregonda acoge una "gran" comunidad de tiburones, aunque asegura que son "100% inofensivos". El también técnico marino detalla que especies como la raya o el tiburón gato se acercan a la costa para reproducirse, anclando los huevos mediante un hilo a rocas o plantas submarinas: "se localizaron en la arena y es normal porque estamos en la época del año de reproducción, un proceso de incubación de 5 a 10 meses de duración". Carretero pide a los ciudadanos que no manipulen los huevos en el caso de verlos en algún arenal de Menorca y recuerda que el embrión de tiburón mide unos 10 centímetros cuando sale del cascarón.
Por otro lado, un total de 41 grupos de voluntarios inscritos en el programa de adopción de playas han participado este fin de semana en la iniciativa Clean Up The Med, que tiene como objetivo concienciar a la población sobre la necesidad de conservar el medio ambiente. Los grupos han retirado plásticos de las playas más significativas de Menorca, así como otros puntos del litoral. Zonas como Son Bou, Cala Galdana o Sa Mesquida han sido objeto de la actuación.
Víctor Carretero, trasladó la posibilidad de adherirse al Clean Up The Med, una propuesta que admite: "ha tenido una excelencia respuesta". El ecologista ha agradecido la implicación de los menorquines: "es una oportunidad para reivindicar todo tipo de acciones de educación ambiental". El programa de adopción de playas cuenta con un total de 1.740 personas, divididas en 105 grupos que realizan acciones de limpieza y de conservación en 116 playas o tramos de litoral.
Primeras medusas de la temporada
El avistamiento de medusas se ha intensificado estas últimas semanas en Menorca, un fenómeno que se atribuye únicamente a un tema de corrientes marinas, según explica Víctor Carretero: “que aparezcan o no las medusas no dependen de un factor humano, simplemente se debe a una cuestión del viento y de corrientes. De todos modos, el hecho que estemos reduciendo muchas poblaciones de peces que se alimentan de ellas provoca más proliferaciones de medusas”. Carretero explica que al no detectar la presencia de estos animales el verano pasado consultó con científicos y todos coincidieron en “no relacionar” la ausencia de medusas con prácticas humanas. Las zonas donde más se han dejado ver las medusas en la isla son Cala en Bosch-Son Saura (Ciutadella), Maó, el litoral de Sant Lluís, así como este sábado en la playa de Son Bou (Alaior). Por otro lado, Carretero relativiza la llegada de la carabela portuguesa y afirma que su presencia en Menorca no debe crear alarmismo: “es muy dolorosa la picada, pero no es cierto que sea mortal. Lo es en la misma proporción que si tienes una reacción alérgica a la picada de una abeja. La medusa de caja, que habitan en Australia, son las más mortales del mundo y se han producido algunos avistamientos en Menorca, aunque es muy puntual y extraño”.