El sector del vino en Menorca atraviesa por un buen momento. Así lo ha asegurado el presidente de la asociación Vi de Menorca, César Palomino, quien afirma que la demanda para probar las elaboraciones de la isla está aumentando progresivamente, aunque ha dejado claro que "necesitamos pequeño empujón más, porque venimos más y esperamos en hacerlo mejor".
Desde la asociación se hace un llamamiento al consumidor final para que pidan un vino de Menorca en el principal canal de distribución, el sector de la hostelería y en tiendas locales: "se está consiguiendo y en tiempo récord. En 2016 no en todos los restaurantes de calidad había vino de la tierra, mientras que ahora mismo lo encontramos en la totalidad de la restauración".
El mayor conocimiento del concepto del vino y de sus clases es un factor que se interpreta positivo. En cuanto a la producción de vino, el tinto se mantiene, pero experimentan una subida en ventas los vinos blancos y rosados. Unos trece bodegueros integran la asociación Vi de Menorca. Con los nuevos proyectos que hay encima de la mesa y la evolución de la uva joven la previsión es doblar "como mínimo" la producción en los próximos años.