El todavía portero de la UD Las Palmas, Álvaro Valles, desea que su futuro se resuelva antes de que se cierre el mercado de fichajes en apenas 10 días. Valles tiene contrato en vigor con la entidad amarilla hasta el 30 de junio de 2025 pero quiere jugar en el Real Betis, aunque por el momento ninguna de las partes cede en sus pretensiones.
Las Palmas no acepta la oferta de traspaso de los andaluces habiendo rechazado una muy superior del fútbol francés, y el Real Betis juega la baza de la voluntad del cancerbero, y sabe que a partir de enero será libre para firmar por cualquier equipo. Mientras tanto, el presidente de los grancanarios Miguel Ángel Ramírez ya ha reiterado en más de una ocasión que si no sale traspasado por una cantidad más elevada, Valles será "un aficionado más en la grada" del Estadio de Gran Canaria, se pasará la temporada en blanco y se devaluará.
El jugador habló en la tarde del lunes con varios periodistas andaluces que estaban en el aeropuerto de Sevilla, donde el cancerbero aguardaba para tomar un vuelo de regreso a la isla tras los dos días de descanso de la plantilla. Sin querer 'mojarse' en demasía, Álvaro Valles sí dejó claro que todo el mundo sabe "que es mi casa", en referencia al Real Betis.
En un tono muy calmado, Valles admitió estar "bastante tranquilo" mientras se resuelve su futuro y no quiso entrar en polémicas con Ramírez, al que conoce "bien desde hace muchos años. Defiende los intereses del club y lo entiendo perfectamente". El futbolista explicó que entrena como uno más de la plantilla de Las Palmas y confía en llegar "a una solución para ambas partes y que todos quedemos satisfechos".
