La crisis habitacional que sufre Canarias ya no tiene precedentes mientras crece el número de viviendas que tradicionalmente se destinaban a alquiler residencial y que ahora se ofrecen solo a extranjeros en estancia corta, las denominadas viviendas vacacional (Vv). El problema ya no solo afecta a los asalariados habituales dependientes de la empresa privada si no que de un tiempo a esta parte trabajadores públicos que pensaban que un sueldo fijo les daría cierta calidad de vida están siendo testigos de como su escaso sueldo, a pesar de ser seguro en el cobro, no les permite algo tan básico como acceder a una vivienda en condiciones cuando consiguen un destino dentro de la administración pública.
Los docentes, tanto si son contratados para una corta sustitución como si es la adudicación de una plaza en su primer destino, suelen aterrizar en una isla diferente a la de residencia hasta que tras unos años puedes solicitar un traslado en el segundo de los casos. Tanto en el primero de los escenarios como en el segungo a los profesionales de la educación les ha surgido el problema de sus vidas: no tienen vivienda disponible para alquilar.
Docentes durmiendo el furgonetas
En una entrevista en La Brújula de Canarias, Gerardo Rodríguez portavoz del sindicato STEC reconoce un problema de máxima gravedad con respecto a las viviendas disponibles. Rodríguez relató como hace pocos años preguntaron a varias inmobiliarias de la isla de Lanzarote cuantas viviendas disponibles podría haber en la isla y la respuesta fue 16.
Hay docentes que consiguen trabajo de sustitución en Lanzarote y están viviendo en su coche
Los casos surrealistas de ofertas disparatadas
En Canarias hemos visto de todo. Se han anunciado chabolas o chamizos como "lugares en donde vivir una experiencia en contacto con la naturaleza" o tiendas de campaña como "espacios de co-working en donde teletrabajar". Detrás de ello solo se econde una completa falta de control por parte de las administraciones. El caso más disparatado es el difundido por el periódico La Provincia sobre alguien que ofrece noches por 15 euros en un solar de Las Palmas de Gran Canaria.
La comunidad autónoma reconoce que solo dispone de 23 inspectores en toda Canarias para verificar que las Vv que se ofrecen tienen licencia y se ajustan a la normativa pero la realidad es que para operar de forma "legal" con una Vv solo es necesario hacer una declaración responsable en los Cabildos. Con todo, el parque de vivienda vacía supera los 20.000 inmuebles, otra clave para entender que es lo que está pasando en Canarias una vez finalizó la pandemia.