Cunde el pánico en el Club Deportivo Tenerife que sigue sin remontar el vuelo ni aun habiendo sido el primer equipo de la categoría en cambiar de entrenador. La llegada de Pepe Mel para reemplazar a Óscar Cano no ha servido como revulsivo y con el madrileño en el banquillo los insulares solo han sumado un punto de seis posibles y siguen colistas, con solo 2 puntos de 21 posibles.
Tras la derrota del domingo en Castellón, Mel aludió hasta en seis ocasiones del total de nueve preguntas que le fueron formuladas, a la carencia de un jugador en la plantilla que pueda ser el mediocentro organizador. Con Aitor Sanz lesionado hasta la segunda vuelta, no se entiende la venta, una vez cerrado el mercado de fichajes, de Álex Corredera al fútbol ruso, que ha debilitado todavía más a un equipo que, o espabila, o se va al pozo de la Primera REF.
Al menos los insulares afrontan ahora un tramo del calendario con dos partidos seguidos en casa. Visitarán el Heliodoro el Cartagena y el Real Zaragoza, el único objetivo de sumar las primeras victorias de la temporada. Las soluciones de Mel para intentar arreglar el agripado motor en el centro del campo pasan por la casa, con los aspectos positivos y negativos que pueden tener para los jóvenes canteranos, teniendo que 'tirar del carro' en una situación compleja como esta, y no con viento a favor.
El primer '6' con el que probó Mel para dotar de fútbol al centro del campo fue Teto, contra el Sporting de Gijón, pero la prueba no terminó de funcionar, a pesar de que el chico le aportó voluntad y ganas. Y es que perfiles como Sergio González, Yann Bodiger o Diarra, no son precisamente los de jugadores de construcción de fútbol, y con los mentados Aitor Sanz y Corredera 'out', la solución pasa por fichar en el mercado de agentes libres, o por la cantera de un entrenador que dio la alternativa a jugadores consagrados hoy en día como Pedri o Alberto Moleiro.
En la cantera blanquiazul el siguiente en poder tener esa oportunidad y responsabilidad es Aarón Martín, del que sus técnicos juveniles hablan maravillas, pero el fútbol profesional no permite margen de error. Aarón tuvo sus primeros minutos con el primer equipo precisamente en Castellón, donde reemplazó a los 81 minutos de juego a Sergio González. También Dani Fernández, que con poco más de 16 años ha sido el segundo futbolista más joven en debutar con el Tenerife en toda su historia, aunque en este caso su perfil es otro, más cerca del área rival; pero Mel le tiene confianza ciega, y el fin de semana pasado entró al terreno de juego precisamente en el lugar de Teto, durante la segunda parte.
Tras la derrota, el entrenador no se escondió y lanzó mensajes claros: "Como ya dije en varias ocasiones, la pelota transita demasiado veloz y debemos encontrar la calma en el juego, encontrando ese juego que nos permita utilizar en zona de creación". "Necesitamos a alguien que maneje el juego, que construya". "No logro encontrar a ese centrocampista o centrocampistas que hagan el juego más fluido", son avisos diáfanos a quienes desde los más altos cargos, quieran escucharle.
